El trazo surrealista de Mr. Salsa
Por Sanserení
Niño geopolítico observando el nacimiento del hombre nuevo es una obra de Salvador Dalí pintada en 1943 que actualmente se encuentra en la Fundación Gala-Salvador Dalí en Figueras, España. En ella observamos la imagen de un huevo gigante resquebrajándose. Un hombre —así lo demuestra la silueta— está a punto de salir de él. Bordeando la cáscara ovalada, como yemas escurridizas, se aprecia también el continente africano y Sudamérica. El niño geopolítico atisba aterrorizado el nacimiento, escudándose en las piernas de su escuálida madre. La atmósfera es sombría y desértica. El cuadro en sí no contempla ninguna relación con la salsa y sus matices sonoros cargados de un vibra que podría traducirse policromática.
Sin embargo, en 1971 el sello Fania Records lanza el álbum From the beginning de Ray Barretto. Un elepé que recopila canciones de trabajos anteriores y en cuya carátula encontramos una réplica de dicha pintura. La réplica es además un dibujo del diseñador puertorriqueño Izzy Sanabria que, a diferencia de la obra de Dalí, presenta una atmósfera distinta, con un marco que inspira sosiego. La playa y el ancho mar son los testigos del nacimiento del nuevo hombre que rasga la cáscara justo en la geografía blanda de Estados Unidos. Aquí la referencia es clara al provenir del diseñador más vanguardista de la salsa: se anuncia el resurgir de la identidad latina que en la década del setenta arremetía con un sonido impetuoso en la escena neoyorquina.
A simple vista pareciera tratarse de un plagio indiscriminado. Por el contrario, el dibujo atiende a un hecho consciente: el trazo surrealista de Izzy corresponde precisamente a su gran admiración por la obra de Dalí, a quien en algún momento llamó su propio Dios, y se extiende más allá de este álbum del 71. Tampoco es fortuito que esta línea gráfica sea particularmente visible en las carátulas de la discografía de Barretto. El percusionista, arreglista y director fue quizás el músico más importante en esa transición que tuvo la música latina a finales de los sesenta. Ray Barretto estuvo presente en las distintas etapas de esta evolución y en cada una de ellas imprimió su sello personal. De esta manera el estilo de Sanabria, igualmente transgresor, empata con la fuerza indestructible del Manos Duras.
Hay al menos cuatro trabajos de Ray Barretto en los que se descubre el surrealismo de Mr. Salsa: Barretto Power (1970), el ya mencionado From the beginning (1971), Que viva la música (1972) y Rican/Struction (1979). En todos ellos se muestran los aspectos claves de este movimiento: la metamorfosis, la separación de fragmentos anatómicos, la representación de lo onírico y lo incongruente. Un elemento que se repite es la mano. En este detalle vemos que hay tensión, agarre y vitalidad. Esta faceta de su arte es firme e impone un estilo propio de promoción musical. Cada carátula expone un universo gráfico y representa el sonido orquestal que, en el caso de Barretto, es pura potencia de tambor.
En el emplatado de la música latina hay todo un universo gráfico por explorar. Que esta entrada sirva de abrebocas.
